Siento una enorme decepción y preocupación por la forma en que empieza este nuevo periodo legislativo. El presidente Zapatero, que en la campaña electoral nos hablaba de la importancia de la lucha contra el cambio climático, toma como primera medida la supresión del ministerio de medio ambiente.
Tengo que reconocer que tenía una cierta esperanza e ilusión en que se crease una vicepresidencia de medioambiente con competencias o control sobre otros ministerios como los de industria, fomento, economía o agricultura y pesca, para atajar el problema medioambiental de una verdadera forma integral (eso de lo que habla el Sr. Presidente). Muchos y muy importantes sectores participativos de esta sociedad lo reclamaban. Además de algunos partidos de izquierda (el PSOE, sin llegar a la derecha, dejó de ser de izquierda). Sin embargo en un ensimismamiento que me recuerda a la última época de Aznar, el Presidente Zapatero parece tomar por lema aquello de: “lo que los demás me dicen que es malo, tiene que ser bueno y lo que me piden, tiene que ser malo”. Magdalena Álvarez, única ministra reprobada y muy ampliamente criticada (no entro a valorar si justamente o no) es colocada de nuevo al frente de Fomento y con una firmeza desconcertante; ¿Qué me piden mayores competencias y peso para el ministerio de medio ambiente?, pues yo lo suprimo… Piensa Zapatero.
El hecho de incorporar el ministerio de medio ambiente al de agricultura y pesca viene siendo a mi entender, como poner a la zorra a cuidar el gallinero. Porque pensemos, ¿Qué busca un ministro de agricultura y pesca? Mayor cuota láctea, mayores cuotas de pesca, menos parones biológicos y más breves, mas caladeros donde faenar, mayor producción, etc. ¿Es esa filosofía compatible con un desarrollo sostenible? Yo creo que no.
Empezando por el título de la cartera ya podemos ver como irán las cosas. ¿A caso el medio marino no es parte del medio ambiente? Entonces, ¿Por qué dos nombres para una misma cosa? ¿Alguien se imagina un ministerio de agricultura y cultivos de hortalizas, un ministerio de economía y pensiones o un ministerio de exteriores y relaciones con Iberoamérica? ¿Entonces por qué tenemos un ministerio de medio ambiente y medio marino? El propio título ya da prueba de la separación que se está creando.
Por otro lado, ¿a quién tenemos al frente de dicho ministerio? Elena Espinosa, economista, quien apostó por un tipo de agricultura industrializada, quien permitió el cultivo transgénico en España (incluso variedades no aceptadas en el resto de países miembros de la UE)
A todo grupo de gobierno se le deben conceder los 100 días de beneplácito. Cierto, si bien hay que recordar que con el gobierno zapatero fuimos el segundo país que más incremento su emisiones de CO2 del mundo, solo por detrás de ese demonio descontrolado que es China, y que estamos muy lejos de alcanzar los compromisos de Kioto. Creó, o más bien, permitió que nuestro desarrollo económico estuviese basado en el cemento y el consumo energético con el fin de obtener una mayor tasa de crecimiento, alejándose mucho de los estándares europeos de productividad y eficiencia. Así que un comienzo de este tipo es cuanto menos, desalentador.
Yo, como votante de izquierdas que dio su voto a Zapatero en el 2004, creí conveniente un “voto de castigo” en estas pasadas elecciones del 2008 apostando por IU (voto matemático viendo la situación y previsible número de votos en la provincia de Pontevedra). Los motivos fundamentales fueron el desacuerdo con el modelo de crecimiento económico, la desacertada política social (sirva como ejemplo los famosos 400€) y el grave problema del cambio climático, no solo no atajado en el período anterior, sino además fuertemente alimentado. Estas primeras decisiones me reafirman en mi posición electoral.
UN REFERENTE. Espárragos y tagarninas.
Hace 8 meses
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